El título que precede a estas líneas es en realidad una frase destacada de la entrevista a Ricardo Alonso, Project Development Manager en BETWEEN Technology. Ricardo es una de las personas que mejor conoce BETWEEN. Lleva, nada más y nada menos, que 15 años en la casa. Actualmente es Project Development Manager y gestiona, dentro de la Oficina de IT Solutions de la empresa, un equipo de 14 ingenieros informáticos con perfiles variados: junior, senior, becarios, project managers…  que manejan múltiples tecnologías, si bien, la mayoría dominan .NET

La ampliación del equipo de Ricardo ha sido exponencial, ya que el número de proyectos ha ido en aumento, a la par que las necesidades de los clientes. En consecuencia, el equipo ha crecido para afrontar los nuevos desafíos técnicos. De hecho, el equipo sigue y sigue aumentando cada día. Para Ricardo, que ha vivido en primera persona el incremento del IT Solutions, asegura que “para formar parte de esta familia lo más importante es la actitud. Los conocimientos y la experiencia suman, pero la actitud multiplica”. Además, Ricardo explica que se siente afortunado de tener un equipo de “tanta calidad humana” ya que “es un grupo que acoge muy bien a los nuevos miembros que se van incorporando, brindándoles desde el principio todo el apoyo posible para que tengan una buena acogida. Todo el mundo se vuelca para que se integre, pasamos la primera semana formando a la persona para que se adapte a las metodologías que utilizamos”, dice Alonso.

¿Pero qué dicen algunos de los propios integrantes del equipo?

 

Eduard Esteban, Fullstack Developer que lleva dos años y medio en BETWEEN, cuenta que, en otros sitios donde ha trabajado, “las relaciones son más frías” y que el trato humano es algo que caracteriza a esta empresa. Además, relata que, a pesar de trabajar en proyectos distintos son conscientes de que, si tienen alguna duda, pueden contar con el compañero de al lado para resolverla.

Por su parte, Alex Barro, un año y medio en BETWEEN, dice que lo que más le atrajo fue el compañerismo que se respira, “la gente se lleva bien” recalca.

De hecho, la cohesión del equipo se fomenta también fuera de la oficina con diferentes actividades como ir al cine, comer todos juntos una vez al mes… Se trata de relacionarse fuera del ambiente laboral, cultivando la faceta personal entre compañeros.

¿Cómo se organizan los betweeners del IT Solutions?

 

Cuando entra un proyecto nuevo, ya sea de la casa o de un cliente externo, lo que hacemos es reunir al equipo para explicar este proyecto, pasarle las skills del proyecto, los requerimientos del cliente, para ver si tienen alguna duda o idea de cómo hacerlo o no hacerlo. El cliente nos pide algo, pero es el equipo el que tiene la potestad de decidir cómo se va a ejecutar para conseguir lo que se nos ha marcado. “En BETWEEN tenemos una cosa muy buena, nos dan libertad para usar la tecnología que queramos para alcanzar la solución requerida por cliente. Esa misma libertad que tenemos para desarrollar el proyecto como creamos conveniente, según nuestra experiencia y las necesidades del mercado”, es la misma libertad que se aplica internamente. Es decir, “todo el mundo tiene voz y voto. Cuando se exponen los proyectos o las problemáticas del día a día, todos pueden opinar y aportar para encontrar una solución”. Este hecho va más allá. Ricardo explica que para él es muy importante recibir feedback como manager y para ello “paso un cuestionario anónimo para saber cómo me ven, cuáles creen que son mis puntos fuertes y debilidades. Esto me ayuda a seguir mejorando como manager con un feedback real y de primera mano”.

Ricardo Alonso – Project Development Manager en BETWEEN

Nos sentimos más cómodos con una metodología que fomente el trabajo en equipo.

Ricardo Alonso – Project Development Manager en BETWEEN

En BETWEEN utilizamos metodología Agile y el framework de procesos Scrum. Esta metodología promueve una gestión de proyectos que fomenta la constante revisión del código y su adaptación. Nos funciona porque facilita el trabajo en equipo, la organización personal y favorece el rendimiento del tiempo de desarrollo. Nos sentimos más cómodos con una metodología que fomente la cooperación y el trabajo en equipo.

A nivel práctico, cada día nos reunimos 15 minutos para saber cómo va cada persona del equipo y saber si tiene alguna duda o se ha encallado en algún punto. Otro de los puntos importantes que llevamos a cabo son las entregas de valor. Cada dos semanas aproximadamente entregamos una parte del proyecto al cliente, cosa que hace que se involucre desde el principio. El cliente hace una prueba y nos da feeback de lo que hemos entregado. Lo bueno es que mientras se lleva a cabo esta prueba por parte del cliente nosotros seguimos desarrollando, pero en cuanto tenemos el feedback reaccionamos en una dirección u otra. No entregamos un paquete completo al final del proceso si no que es más óptimo para nosotros hacer entregas parciales y poder reajustar el proyecto a tiempo.

Además, después de haber entregado el proyecto siempre hacemos un análisis, una retrospectiva para analizar aspectos de mejora y aspectos que podemos mantener… Esta metodología nos gusta porque no es largoplacista sino a con mirada a corto plazo y sabemos muy bien lo que tenemos que hacer a dos semanas vista.